La semana pasada terminé la escuela. Ya no vuelvo más. Todavía me queda un año, pero voy a rendirlo libre. La escuela decididamente no es  para mi.  La cuestión es que realmente  no <odio> la escuela, sino, más bien al contrario, me parece excelente como centro de socializacion, me llevo bien con mis compañeros, profesores, directivos; me gustan las actividades, y todos los etcéteras existentes.. Pero por otro lado, siempre trato de volverme mas independiente, y la escuela va a la inversa. Mi humor en las temporadas escolares es una completa mezcolanza de mal humor, autoestima bajo y stress. Y sumándole que no controlo mis horarios, que el uniforme me molesta demasiado...

2 comentarios:

  1. ES CUESTIÓN DE ADAPTAR LO EXTERNO A UNO Y ASÍ TODO SE VUELVE MAS SATISFACTORIO!

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  2. Concuerdo con el comentario primero, es cuestión de adaptarse y bueno sí, si algo no nos gusta no nos gusta, yo también estoy esperando la universidad, un beso grande (:

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